Y aunque parezca increíble, yo una chica de mar y playa del cantábrico me vuelvo chiflada con las sardinas que hacen en una taberna del centro de Zaragoza...
Sus sardinas son famosas y coger una mesa en la terraza es un placer veraniego a 39 graditos......para mi un placer.......(soy del norte jjjaaaaajj)
Otra sorpresa que nos encontramos se llama El Chalet, un divino restaurante con mucho gusto y mimada gastronomía enclavado en un chalecito divino!!
Algunas de las delicias:
Y de vuelta a casa nos desviamos un poquito para visitar a Begoña en el Deportivo de Navarrete, del que ya os he hablado y que me enamoro cuando le conocí!
Como no, su barra de pintxos y su calidad nos reenamoroooooo!!!
Hasta pronto...............